El día 2 de abril (coincidiendo con el cumpleaños de mi hermano) se celebra el Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil. ¿Por qué este día? Porque se conmemora el aniversario del nacimiento del genial Hans Christian Andersen, maestro de todos los que queremos hacernos un hueco en la literatura infantil. Llego tarde, lo sé, pero esta semana ha sido bastante completa por muchas razones, algunas de las cuales os explicaré pronto.
La literatura infantil y juvenil… Considerada por muchos como un subgénero de menor importancia que la literatura “adulta”. No sé vosotros, pero yo estoy totalmente en contra por varios motivos, como ya dije en la entrada Fantástica Fantasía .
Por eso, prefiero no categorizar los distintos tipos de literatura que hay. Yo he leído libros para adultos cuando era niño y joven y ahora leo libros infantiles y juveniles, y he disfrutado y disfruto tanto los unos como los otros. Por lo tanto… ¡Viva la literatura! Y, por supuesto, ¡viva la literatura infantil y juvenil!
“La vida en sí es el más maravilloso cuento de hadas”.
Hans Christian Andersen
In April, 2nd (same date as my brother’s birthday) we celebrate the World Children and YA’s Book Day. Why? Because it is also Hans Christian Andersen’s date of birth, one of the masters of everyone who wants to become a children or YA’s author. I am a bit late, I know, but this week has been quite busy, I’ll let you know what’s happened as soon as I can.
Children and YA’s literature… Considered by some people as something less important than “adult’s” literature. I don’t know what your opinion is, but I completely disagree for several reasons, as I already said on the post Fantastic Fantasy.
For that reason, I prefer not to classify the different kinds of literature that we can find. I have read books for adults when I was a child and now I read children and YA’s books, and I have enjoyed and enjoy both. So… Long life to literature! And, of course, long life to children and YA’s literature!
“Life itself is the most wonderful fairy tale”.
Hans Christian Andersen
Mi respeto y admiración por este género. Seguro que en algún momento te han contado un cuento. Es el principio de todo, el trampolín hacia la lectura. Recordemos que antes de ser adultos fuimos niños. Si guardamos ese recuerdo y no perdemos la ilusión de contar un cuento de disfrutar de la fantasía y la magia, de parecernos un poquito a Peter Pan, la vida sería más justa para todos. Jamás deberíamos perder la dulzura del corazón de un niño, pues los niños son solo niños.