Crítica: El placer por el cambio

Título: El placer por el cambio. La transición ecológica como camino hacia la felicidad.

Autores: Gaël Giroud, Carlo Petrini, Stefano Arduini

Prólogo del papa Francisco

Editorial: Malpaso y Cía

Como bien sabéis, entre tanta literatura, de vez en cuando me pierdo en otro tipo de libros. Ensayos, biografías, estudios… Este libro ha sido un remanso de tranquilidad que me ha venido como anillo al dedo.

Sí tengo que contaros que, al subir algunas stories compartiendo la lectura, varias personas me comentaron que no me pegaba mucho leer libros religiosos ni de autoayuda, y esas personas estaban en lo cierto: no me va nada leer ni lo uno ni lo otro. Pero este libro no habla de religión ni es un manual de autoayuda. Es un libro que, mediante una serie de preguntas y respuestas, habla de ecologismo, de justicia social, de igualdad, del cuidado del medio ambiente, de la propuesta de cambios que puedan mejorar nuestra relación con el planeta que habitamos y que, no cabe duda, estamos aniquilando a pasos agigantados. 

Es un libro ambicioso, pues no podemos conseguir detener el deterioro del planeta sin ambición. Porque, como vemos año tras año, las palabras y las promesas acaban arrastradas por la propia inmundicia que la humanidad esparce por todas partes. Porque el cambio climático es ya una realidad tan evidente que asusta. Hoy mismo he leído la noticia de que Rio de Janeiro ha registrado una sensación térmica de 62,3°C. Y que aún haya gente que lo niegue, incluso desde la política (y que aún haya gente que vote a esos partidos…).

Es una conversación entre personas preocupadas por nuestro presente y nuestro futuro, con claves fundamentales para comprender qué ha ocurrido, qué está ocurriendo y qué ocurrirá si no ponemos freno a tanto abuso, a tanta torpeza, a tanto egoísmo.

No quiero ser yo quien deje por escrito todo lo que he aprendido de este libro. Os voy a emplazar a que lo leáis, porque no os va a dejar indiferentes. Es crudo, ya os lo aviso, porque es real, porque habla sin paños del peligro de seguir viviendo como si no estuviera ocurriendo nada, pero es una lectura necesaria y, ojalá algún día no demasiado lejano, se cumpla lo que se pide, aunque la realidad es que parece que ya vamos muy tarde. 

Si os interesa este tema, de verdad os lo digo, la lectura es casi obligatoria. 

Lo que más me ha gustado: saber que hay gente implicada en lograr ese cambio tan necesario.

Lo que menos me ha gustado: la sensación de derrotismo que se me ha quedado al ver que todo lo que cuenta es la realidad que vivimos y que, sin embargo, apenas se hace nada para impedirlo.

“Si la máxima ambición que proponemos a un joven es convertirse en influencer o creador de contenidos, somos responsables de la proletarización de nuestro futuro”.

Deja un comentario