Crítica: Luz en retirada

Título: Luz en retirada

Autora: Álex Reyes

Editorial: Valparaíso

IX Premio Valparaíso de Poesía

Álex Reyes dice (me dijo a mí, al menos) que no es poeta. Que él es novelista (que, vale, también lo es), pero que no es poeta.

Me lo dice mientras nos ponemos cuerpo físico en la Feria del Libro de Madrid, mientras me dedica este poemario que es su “Luz en retirada”, y yo, obviamente, no me lo creo.

Me gusta, eso sí, la humildad (que no es fingida, esas cosas se notan), me gusta la calma cuando habla, su gesto tímido que es una evidencia más de que he hecho bien en no creer lo que me dice sobre lo de ser poeta.

Después, leo su novela “Lo que no podré vivir” https://jorgepozosoriano.com/2024/09/18/critica-lo-que-no-podre-vivir/ , y compruebo que sí, que es novelista, que ahí no me ha mentido.

Luego, leo su poemario. Y me enamoro. Porque, en ese breve espacio de tiempo que compartimos, me mostró al poeta que es. Un poeta sencillo. Un poeta valiente. Un poeta humilde. Un poeta de verdad.

Este libro es un paso firme en la tierra (en La Tierra). Una deuda saldada. Una promesa cumplida. Es un grito arropado por el paso del tiempo, por la madurez, por ese olvido sin remedio por el que el dolor se acaba tamizando. Es un llanto que se comparte, amplificado por la fuerza de la poesía.

Es uno de esos libros que te dejan un nudo en la garganta, pero que lees con orgullo, con ese pensamiento de orgullo por quien ha sido capaz de volcar el dolor en papel, de emplear la forma de lo poético para tratar de dar belleza a lo horrible, para que la oscuridad del mundo no nos acabe devorando.

La poesía de Reyes es tan cruda como su prosa, igual de cercana, de desnuda, de humana. No hay poemaque nos haga caer en la indiferencia, porque cada uno de ellos nos arrastra a vivir las vivencias de quien los ha escrito, nos hermana, y eso, amigos y amigas, esa es la grandeza de la poesía: sentirnos del mismo modo que quien la escribe, aunque no hayamos vivido lo que nos cuenta.

El caso es que le tengo que perdonar esa mentira de que no es poeta, no tenérselo en cuenta, porque descubrirlo así, como el poeta que es, ha sido un regalo que no quería perderme.

Lo que más me ha gustado: podría citar varios, pero vale con decir tan solo que hay muchos poemas que me han hecho detenerme al terminarlos, respirar, y volver a leerlos.

Lo que menos me ha gustado: que quiero leer más poesía de Álex Reyes, pero no sé cuándo podré, con eso de que él es novelista…

“Cómo hacer para olvidarme

cómo

de esta agonía,

de estas pobres ganas de darte

un amanecer de luz quebrada”.

Álex Reyes